En la mitología griega, se decía que Hefesto (Vulcano), era el dios cojo, deforme, el patizambo... y otros calificativos bastante despectivos, sin embargo era el dios de la metalurgia y era muy trabajador.
Hay dos versiones sobre la deformidad de Hefesto, una de ellas, cuenta que al ser únicamente hijo de Hera, nació deforme. La otra cuenta que Hefesto siempre se metía en las disputas de Zeus y Hera defendiendo siempre a su madre y, en un arrebato, Zeus le arrojó desde el Monte Olimpo y cayó rodando durante un día por el monte Olimpo; así explican los griegos su deformidad y por qué era cojo.
Por todo esto Zeus lo casó con Afrodita, la diosa más bella, pero ésta desprecia y siempre rechaza a Hefesto y le engaña con otros dioses y mortales.
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